Entrevista con Pierre Bonhomme

Director Ejecutivo de ALTEN


Como socio de líderes en el sector aeroespacial, de defensa, seguridad y naval, ALTEN se encuentra en una posición privilegiada: tanto como actor en grandes proyectos de ingeniería, servicios al cliente de fabricación, transformación digital y TI, como observador de la dinámica del mercado. Pierre Bonhomme, Director Ejecutivo de ALTEN, arroja luz sobre el sector aeroespacial, que representa más del 20 % de los ingresos del grupo y ofrece importantes perspectivas de crecimiento.

 

Tras experimentar la mayor crisis de su historia, el sector aeroespacial se enfrenta ahora a complejos retos. ¿Cuáles son?

La pandemia de la Covid-19 paralizó repentinamente el tráfico aéreo mundial. Ahora, la relajación de las medidas sanitarias mundiales ha acelerado el retorno de la demanda. La mayor dificultad a la que se enfrenta hoy el sector aeroespacial es la entrega, con la enorme incongruencia de un mercado muy boyante y la incapacidad de servirlo. ALTEN estaba preparado porque tomamos la decisión durante este periodo tan difícil de invertir y capitalizar, manteniendo nuestras competencias. En comparación con 2020 y 2021, cuando el sector atravesaba una crisis de demanda, hoy vemos cómo se pasa a una crisis de oferta. Los retos de los próximos meses y años serán seguir impulsando la industria aeroespacial, que se está beneficiando de una situación macroeconómica muy favorable, al tiempo que mejoramos la eficiencia operativa, desplegamos nuevas capacidades digitales, garantizamos la seguridad y reducimos las emisiones de carbono, porque el medioambiente y la sostenibilidad son piedras angulares de nuestro negocio. En general, tenemos buenas razones para ser optimistas.

¿Hemos vuelto a los niveles de demanda anteriores a la Covid?

Todo depende de cómo se mire. En cuanto al número de pasajeros, estamos volviendo a los niveles anteriores a la Covid. Según datos de la IATA, a finales de 2022 la demanda en Europa se acercaba a los niveles de 2019; la demanda mundial se situaba en dos tercios del nivel anterior a la crisis. Para 2023, las tendencias muestran un aumento continuado del número de pasajeros transportados, impulsado por Asia y el Pacífico con la relajación de las medidas sanitarias, especialmente en China. El número de vuelos de hoy es más del 80 % de los de 2019, teniendo en cuenta que el crecimiento hasta 2019 fue impresionante.

Por otra parte, el sector aeronáutico aún no se ha recuperado. La cadena de suministro, afectada por la interrupción de las cadenas de montaje y suministro, no ha recuperado su nivel de rendimiento de 2019, a pesar de que la demanda está ahí. Esto genera una enorme demanda por parte de los MOE. Para que se haga una idea, un avión se compone de miles de piezas diferentes; si falta una, el aparato no puede despegar. Restablecer la cadena de suministro es, por tanto, un reto importante si queremos volver a tasas como las de 2019. Según las previsiones del Groupement des Industries Françaises Aéronautiques et Spatiales (GIFAS), la situación en Francia debería normalizarse a finales de 2024 o principios de 2025.

El repunte de la actividad está generando un fuerte impulso en la contratación, pero el sector tiene dificultades para hacer frente a la escasez de talentos. ¿Cómo se explica esto?

En general, hay una escasez de ingenieros en el mercado. Los empleos aeronáuticos han cambiado en los últimos años, con una demanda de nuevas habilidades en ámbitos como la ciencia de datos, la inteligencia artificial y la ciberseguridad. En consecuencia, ha aumentado la necesidad de mano de obra cualificada. Los trabajos de ingeniería nunca han sido tan importantes. Esto ha creado grandes ambiciones en el sector para atraer a los mejores talentos. Como socio de nuestros clientes, ALTEN desempeña un papel fundamental. Nuestra misión es apoyar sus esfuerzos de innovación en todo el mundo. En la actualidad, casi 9000 ingenieros de ALTEN trabajan para las industrias aeroespacial, de defensa y de seguridad en más de 22 países de todo el mundo. Solo en aeronáutica, la cifra asciende a 6000. Nuestro valor añadido reside en nuestra capacidad para prestar una asistencia personalizada, especialmente a través de actividades en países cercanos y en el extranjero y mediante ofertas de paquetes de trabajo. Esto responde a un triple objetivo: satisfacer la demanda de nuestros clientes de presencia geográfica de ALTEN en los países en los que ellos mismos están ubicados; generar ganancias competitivas; y crear un recurso de ingenieros que trabajen a distancia en nuestros centros de entrega. Somos realmente el hogar del ingeniero.

¿Cómo puede el sector cumplir sus compromisos de descarbonización cuando se enfrenta a otros retos inmediatos?

La situación actual de la cadena de suministro no debe hacernos olvidar los retos de descarbonización a los que se enfrenta el sector. La presión medioambiental nunca ha sido mayor. A pesar de la difícil recuperación, el sector aeroespacial debe seguir innovando, garantizar la seguridad total e invertir en investigación y desarrollo para cumplir sus compromisos: aviones propulsados por hidrógeno, electrificación y nuevos combustibles sostenibles para la aviación. Las emisiones netas cero para 2050 deben seguir siendo una prioridad para toda la industria. En 2018, la aviación comercial representó el 2,6 % de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero. Solo la combustión de carburantes corresponde a unos 1000 millones de toneladas de CO2 a lo largo de un año, una cantidad equivalente al consumo anual de Japón, que no es nada desdeñable. Dada la fuerte recuperación del crecimiento que se espera para el sector, urge actuar para que la industria no suponga un mayor lastre en términos de calentamiento global. Estoy convencido de que la solución reside en nuestra capacidad de innovación. Más del 25 % de nuestras actividades en 2022 se centran en temas de innovación sostenible, como el uso del hidrógeno como combustible para descarbonizar la aviación civil en 2025, la informática verde para ser un líder digital responsable y el ecodiseño para reducir el impacto ambiental de los productos de nuestros clientes. Los ejemplos abundan. Estudiamos la arquitectura del fuselaje de los aviones para permitir la integración de depósitos de hidrógeno líquido, teniendo en cuenta las limitaciones de las temperaturas criogénicas, las fugas, etc. Invertimos en la reducción del consumo energético en la fábrica 4.0 con el ecodiseño de sensores inteligentes para producir propuestas de valor de mantenimiento predictivo.

ALTEN se moviliza para que nuestros clientes puedan hacer frente a sus retos.