Desirée Vila: “Lo único incurable son las ganas de vivir”

Desirée Vila

La labor de integración social de ALTEN avanza un paso más gracias a la estrecha colaboración que realiza con la Fundación Adecco. En esta ocasión, tuvimos la oportunidad de conocer la historia de superación de la atleta paraolímpica Desirée Vila.

Todos tenemos una discapacidad, que se resume en nuestras limitaciones, y una súper capacidad, que es aquello en lo que destacamos ”, nos contaba Desirée en esta interesante charla.  La vida de Desirée siempre ha estado ligada al deporte. Antes de convertirse en atleta paralímpica, competía a nivel nacional e internacional en gimnasia artística. A sus 16 años, sufrió una lesión fatal en la pierna derecha que causó la fractura de la tibia y el peroné, obstruyendo la arteria. Debido a una negligencia médica, le comunicaron que tenían que amputar la pierna o moriría. Para Desirée vivir sin una extremidad era lo peor, “ no sabía que se podía andar con prótesis o hacer deporte ”, incluso llegando a pensar que “ prefería morir antes que perder la pierna ”. Precisamente, su principal papel en la Fundación es tratar de acercar la realidad de las personas con discapacidad a las empresas o escuelas, para ayudar con su experiencia a afrontar una situación como la que vivió ella.

Cómo llegó a ser atleta paralímpica

El primer año desde el accidente “ fue muy duro, me marcó mucho, no me gustaba ni mi cuerpo ni mi prótesis ”, afirma. Sin embargo, aprendió una importante lección, “ mi prótesis no me define como persona, sino que forma parte de mí ”. Agradece el papel que han jugado su familia y amigos, en especial su madre, que le decía “ Desirée, céntrate en lo positivo, que llegará en algún momento ”. En ese punto de inflexión, Desirée comenzó a llevar su prótesis de acuerdo con su personalidad: colorida, con purpurina (o “brilli brilli”, como ella lo llama) y que llamase la atención.

Después de un año sin deporte, le pusieron la prótesis de correr y “ la sensación fue increíble ”. Aprendió a correr de nuevo y recibió la llamada de la selección española. Actualmente, se prepara para los juegos olímpicos de Tokio 2021, aplazados por la COVID-19. Compara la incertidumbre que vivimos actualmente con el momento en el que le amputaron la pierna y no sabía cómo todo iba a afectarle en su vida a partir de ese momento. Para ella, fue decisivo dejar de preguntarse “ ¿por qué me s컞? ” y cambiar a “ ¿para qué?, ¿cómo puedo usar este aprendizaje para ayudar? ”.

Es importante valorar lo que realmente importa

Desirée Vila no solo destaca por representar a España en los juegos olímpicos. Además, ostenta un doble récord nacional: en las pruebas de 100 metros lisos y en salto de longitud. Los logros que la atleta ha conseguido hasta ahora la hacen sentir que “ ha llegado lejos ”, incluso más de lo que podría haber llegado con la gimnasia artística.

Para ella, hay que valorar lo importante y centrarse en lo positivo. Recuerda, entre risas, su parte positiva: “ solo lavo un calcetín, solo me huele un pie y me ahorro mucho dinero al depilarme. Además, si me pisan no me duele porque no me entero ”. En estos seis años, Desirée Vila ha visto que la amputación fue la solución al verdadero problema: la posible muerte. En ese momento, “nació una nueva Desi y todos aprendimos a vivir con una prótesis ”, porque lo importante no es lo que te falta, “sino lo que tienes”.